miércoles, 27 de mayo de 2015
5 pequeños hábitos que te llevarán al Éxito
5 Consejos que te acercarán al Éxito
Ser un adicto al trabajo se considera a veces una virtud, pero no tiene que ser algo necesario para alcanzar el éxito. ¿Por qué elegir trabajar hasta la extenuación cuando simplemente puedes trabajar más eficientemente? Si te gustaría tener más tiempo y energía para aquellas tareas que de verdad marcan la diferencia, descubre los siguientes cinco pequeños hábitos que te ayudarán a conseguir el éxito.
1. Define la meta a cumplir.
Tu entorno de trabajo puede hacerte cumplir tu productividad o destrozarla. Si te encuentras incómodo con tu entorno, no vas a trabajar a tu mejor nivel. Esto, es especialmente importante para aquellas personas que son tímidas, ya que la gente piensa que suelen ser antisociales pero no es cierto, simplemente no maneja la estimulación del mismo buen modo que los extrovertidos.
Lo que consideramos estimulación, puede ser una simple llamada de teléfono, hablar con tus compañeros de trabajo, interrupciones constantes, interacciones con los clientes o cualquier evento que te hace perder la concentración en la tarea que tienes que llevar a cabo.
Ante esto, puedes pensar que simplemente “Tienen que mejor en la capacidad de hacer varias tareas al mismo tiempo”. Error. No hay nada parecido a la habilidad de multitarea, el cerebro humano no es capaz de concentrarse en más de una tarea al mismo tiempo. La multitarea es una palabra que la gente usa para describir el acto de cambiar la atención de una tarea a otra. Mientras que muchos la consideran como una fortaleza, deberían de darse cuenta de que solo lleva a errores.
La concentración en una tarea es esencial para el éxito. Es por esto, porque yo siempre fijo mis objetivos antes de sentarme a escribir mis artículos. Me pongo un poco de música clásica que me ayude a inspirarme y enciendo un poco de incienso para ayudarme a relajarme y por último enciendo el editor de textos a pantalla completa para que sea la única cosa que pueda ver.
¿Cómo puedes configurar tu entorno de trabajo de modo que te motive a dar lo mejor que tienes dentro? Pues por ejemplo, puedes poner una foto de tu modelo a seguir en un bonito marco en la pared. O también puedes escribir una frase que te haga sentir algo y la colocas en tu escritorio. La cuestión es ser creativo.
2. Apaga el teléfono móvil
Mucha gente está tan pendiente de su móvil que parecen drogadictos en busca de ayuda. Si eres de los que comprueban todos los mensajes según le llegan, puedes entrar dentro de esta descripción.
Puede sonar demasiado dramático, pero no lo es. Mucha gente tiene adicción a la tecnología y yo soy una persona que pasó por ello, ya que por ejemplo era incapaz de disfrutar de una cena con los amigos sin comprobar las actualizaciones de mi Facebook cada par de minutos. Y es algo que tuve que trabajar para mejorar.
Algunas de las cosas que tuve para dejar esta adicción a la tecnología, es que empecé a apagar el teléfono cada vez que me ponía a escribir. Es mucho más fácil concentrarse sin distracciones. También empecé a tener al costumbre de dejar el móvil en el coche cada vez que iba a citas o salía con mis amigos, así no sería tentado sino tenía mi teléfono en el bolsillo.
Así, ahora consigo apagar el teléfono cada vez que me pongo a leer un libro o empiezo a ver mi serie de televisión favorita. Hago esto, porque la necesidad de comprobar mi email puede llegar a ser irresistible. En cambio, mi tiempo de ocio suele ser mucho más satisfactorio ya que efectivamente, puedo concentrarme totalmente en aquello que esté haciendo.
3. Prepara la comida en grandes cantidades.
El cuerpo humano es una máquina que necesita vitaminas y minerales esenciales para dar su mejor rendimiento. Sin estos nutrientes, tu humor y la energía disponible se verá resentida.
Como dije, se lo que significa estar ocupado. Es tremendamente difícil encontrar tiempo para hacer una cocina saludable todos los días. Pero esto tiene una solución, no tiene porqué ser necesario hacerla todos los días.
Solo cocino los domingos, porque es el día en el que estoy menos ocupado. Y entonces, hago la comida suficiente para toda la semana. Por ejemplo, y esto es ajustable para cada persona, una forma de hacerlo es ir a la tienda y comprar carne y verudras, comida que paso por la parrilla o dejo cortada en bolsitas herméticas. Todo esto, puede llevarte un escaso par de horas.
El objetivo de esto, es que ahora puedes combinar estos ingredientes ya preparados para hacer una amplia variedad de comidas. Por ejemplo, en un desayuno en el que tengas huevos, puedes poner unas pocas de esas verduras ya preparadas y tienes un sabroso desayuno. Desde aquí, las posibilidades que tienes son las que tu imaginación y tu estómago deseen.
4. Vete a la cama a la misma hora todas las noches
Ser un adicto al trabajo ha acabado por ser algo a lo que aspirar en nuestra sociedad moderna. Y yo no sé tú, pero a mí la idea de llevarme hasta la extenuación todos los días me suena terrible.
Deja de comprobar los mensajes de correo electrónico de la oficina en casa. Deja de considerar el trabajar hasta altas horas de la madrugada como si fueran actos heroicos. Solo te estás engañando, tu cuerpo no puede funcionar correctamente si estás haciéndolo pasar el límite una vez tras otra.
Si no consigues dormir las horas suficientes, estarás tan bien como si estuvieras borracho. Hay estudios que han demostrado que privarte de sueño puede bajar tu rendimiento tanto como si tuvieras una intoxicación etílica.
Yo solía por olvidarme de esto y trabajar tantas horas hasta que me cayese dormido. Me sentía atontado la mayoría del día, mientras que esto tenía un impacto terriblemente negativo en mi habilidad de concentrarme. Tras estudiarlo, me di cuenta de que mi solución era construirme una especie de ritual para mis horarios de sueño.
Todos los humanos somos personas de hábitos. Nuestras acciones en el día a día no son necesariamente realizadas por alguna razón. En cambio, casi el 40% son resultados de hábitos automáticos. Si te cuesta conciliar el sueño, puedes usar esto como una ventaja.
Elige dos o tres actividades para hacer antes de ir a la cama cada noche, con la única condición de que no pueden involucrar un teléfono móvil u ordenador, ya que la luz de estos mantienen tu cuerpo en estado de alerta. Deberías de apagarlos una hora antes de irte a la cama.
Ahora mantén ese ritual de una forma sencilla de forma que puedas recordarlo con facilidad. Un ejemplo de ritual, puede ser, darte una ducha, lavarte los dientes y ponerte a leer un libro en la cama. Estos rituales necesitan de práctica, pero al final te acabarás dando cuenta de que una vez lo hayas hecho unas cuantas veces, los ojos empiezan a pesar después de leer un capítulo o dos y caerás dormido fácilmente.
5. Concéntrate en un punto de acción de cada artículo que lees.
Si no tienes intención de llevar a la práctica nada del material que lees online, estás cometiendo una especie de masturbación mental. El consejo es algo terrible si no se lleva a la práctica. Por lo tanto, es costumbre elegir uno de esos pequeños hábitos y concentrarte en él un tiempo. Y una vez consigas cierto éxito con alguno de esos pequeños hábitos, concentrarte en otro nuevo.
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